Un tipo implacable de Elmore Leonard.

No recuerdo de haber leído nada de Elmore Leonard pero esta novela me llamó la atención en cuanto la vi en la biblioteca; siempre he sentido gran atracción por las películas  americanas  de cine negro de gánsters y de parejas criminales  como John Dillinger o Bonny and Clyde y por lo que contaba en la contraportada Un tipo implacable discurría por ese camino, así que me la llevé a casa para incluirla en la Yincana Criminal dentro de todo es posible en América y La víctima es un hombre.

                Editorial: Alianza Editorial, Fecha de Publicación: 2006, 416 pág.

El autor: Elmore Leonard nació el 11 de Octubre de 1925 en Nueva Orleans, Luisiana, EEUU y murió el 20 de agosto de 2013 en Bloomfields Hills, Michigan, EEUU. sus primeras novelas publicadas en los años cincuenta eran novelas del oeste, pero después se especializó en novelas policíacas y desde entonces ha escrito numerosos libros muchos de los cuales han sido adaptados al cine convirtiéndose en películas de éxito de cineastas tan dispares como John Sturges, Quentin Tarantino o Steven Sorderbergh. En algunos casos e proceso ha sido a la inversa, escribiendo novelas a partir de guiones originales o tratamientos para guiones cinematográficos.Entre los numerosos galardones concedidos a su prolífica carrera literaria ( 45 novelas) cabe destacar el haber sido nombrado Gran Maestro por la Asociación Norteamericana de Escritores de Misterio y el Premio Cartier Diamond Dagger 2006 que le ha otorgado la Asociación de escritores de Novela Negra en reconocimiento de toda su obra.
Entre sus novelas podemos destacar: Chantaje mortal 1974, Ciudad salvaje, 1980, Fulgor de muerte, 1985, Bnadidos, 1987, Persecución Mortal  1989, Un tipo implacable 2005,   el día de Hitler, 2007, Perros callejeros, 2009

Argumento: Corre la década de los treinta en la vieja Ojlajoma. Son los años de Bonnie and Clyde, Pretty Boy Floof, Machine Gun Kelly, John Dillinger y Baby Face Nelson, aquellos míticos gánteres que llenaron las primeras planas de la prensa de la época e hicieron correr rios de imaginación.

Carl Webster, hijo de un veterano de la guerra de Cuba, por cuyas venas corre sangre india Creek y cubana, a sus veintiún años es ya un policía reconocido por la frialdad y la precisión con la que mató de un disparo certero a un conocido atracador de bancos, Emmet Long. Su antagonista es un joven autodestructivo, Jack Belmont, quién tras chantajear a su padre, magnate del petróleo, aspira a convertirse en el " enemigo publico número 1" en un afán de notoriedad. La persecución no resultará sencilla y se convertirá en un autentico duelo entre dos tipos implacables en busca de la fama.
El triangulo narrativo lo completa completa Tony Antonelli, de la revista True Detective, un periodista ansioso de inmortalizarlos e inmortalizarse, y la pelirroja Louly Brown con un tacto especial para atraer tipos duros.

Análisis de la novela y opinión personal: Cuando es la primera novela que lees de un autor y no conoces ni su estilo ni su forma de narrar siempre es una aventura elegir un libro por lo que te cuenta la editorial en la contraportada y no porque mientan deliberadamente, sino porque presentan de la forma más atrayente posible el contenido de la historia y muchas veces lo que te encuentras no es exactamente lo que te prometieron, afortunadamente este no es el caso. Un tipo implacable nos traslada a Oklahoma en los años treinta, a ese escenario que tan bien conocemos de las películas: grandes extensiones de terreno en las que no se ve un alma, bandas de forajidos asaltando bancos ante la impotencia de sus indefensos empleados, garitos de apuestas ilegales donde a todas horas se quebranta la ley seca, gansters que  ponen fin a sus diferencias a golpe de ametralladora y hermosas mujeres rubias o pelirrojas envueltas en caro perfume que esperan el resultado del duelo para marcharse del brazo del vencedor... 

En este ambiente ha crecido Carl Webster, hijo de un veterano de la guerra de Cuba,  por cuyas venas corre sangre india creek y cubana, que a los quince años presenció el asesinato de Junior Harjo, policía indio a manos de Emmett Long, y que a los veintiuno convertido en sheriff, lo venga matando a su asesino ya por aquel entonces un conocido atracador de bancos, Carl es un policía implacable y honesto que se ha jurado limpiar su jurisdicción de atracadores y asesinos, y que nunca amenaza en vano, por eso cuando dice "si tengo que sacar mi arma dispararé a matar..." su oponente puede darse por muerto..

Pero también Jack Belmont hijo del millonario del petróleo Otis Belmont  sabe lo que se juega, después de un intento de chantajear a su padre y de que en castigo este lo ponga a trabajar en la limpieza de tanques petrolíferos, trabajo que muy pocos aguantan, decide vengarse incendiando prendiéndole fuego a uno de sus depósitos, no cuenta con que su padre cansado ya de sus fechorías lo denuncie y sea condenado a prisión, su estancia en la cárcel le hace reflexionar y decide que a partir de ese momento será más conocido que su padre y ocupará la primera plana de los periódicos,  para ello se convertirá en atracador de bancos  y  en enemigo publico nº 1. la " carrera" de Jack parece ir viento en popa hasta que su camino se cruza con el de Carl ¿ Quién de los dos resultará vencedor?.

Y para que nada falte en este " singular combate", Tony Antonelli, reportero de la revista True Dectective, un periodista también ansioso de fama y notoriedad será el encargado de seguirlos a lo largo y ancho del país y de informar al publico de todas las vicisitudes del encuentro entre los dos titanes.... 

En cuanto a la chica...Se trata de Louly Brown, guapa, pelirroja, su padre era  peón en una granja de Tulsa que se unió a los marines y murió en la Primera Guerra Mundial, joven y desvalida solo podía ser dos cosas, esposa o puta, y  se convirtió en la amante de Pretty Boy Floyd, aunque su situación parece cambiar cuando conoce a Carl...

la novela sabe mantener el interés en todo momento, la tensión esta perfectamente dosificada y los personajes muy bien trazados, no solo los principales, sino también los secundarios como Emmett Long, Virgil Webster,  Norm Dilworth o su esposa Heidi,  los diálogos son muy precisos e inteligentes, y la atmósfera totalmente lograda. Leerla es como ver una buena película.

Para terminar: He leído en una entrevista que la gente solía pagar para salir como personaje en alguna de sus novelas, y que un hombre llego a entregar cuarenta mil dolares para que utilizase el nombre de su esposa,   el dinero era para fines benéficos. Eso si, la persona no sabía que papel le habían asignado hasta que no leía el libro... ( ¡ que ocurriría si no le gustaba? ¿ Devolvía el dinero...?.

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