Leí La casa de la alegría hace muchos años y prácticamente no la recordaba, así que me pareció un buen momento para releerla ya que la autora me encanta. Hoy la traigo al blog dentro de la VI Edición del reto de las Inquilinas de Netherfield todos los clásicos grandes y pequeños versión estándar, nivel 3 "Titulo en el que se repita al menos una palabra"
Editorial: Alba. Fecha de publicación:1905/2008. 382 pág.
La autora: Edith Wharton (1862.1937). Su familia era de clase alta. Se casó con Edgard ( Teddy) Robbins Wharton, pero se divorciaron a causa de las repetidas y públicas infidelidades de su marido, que afectaron mental y físicamente a la escritora. A partir de su matrimonio también pasaría parte del año en Europa: en Italia primero y en París después, donde se estableció en un apartamento rodeada de princesas y duquesas, novelistas, historiadores y pintores.
Su primera novela El valle de la decisión (1902) fue un romance histórico que transcurre en la Italia del siglo XVIII; al año siguiente publicaría Santuario y en 1905 vería la luz La casa de la alegría. En 1907 se estableció en Francia don se convirtió en discípula y amiga de Henry James. De esta época destaca su novela corta Ethan Frome, 1911. En 1930, fue ganadora del Premio Pulitzer en 1921.
Argumento: Huérfana a los diecinueve años, Lily Bart es acogida por una tía en el seno de los más antiguos clanes de la sociedad neoyorquina. Diez años después, aún no se ha casado, y ni su exigua renta personal ni la generosidad de su protectora ha hecho nada para favorecer su independencia.
Lily, hermosa, inteligente, con clase, educada para ser un adorno; empujada al mercado laboral del matrimonio, irá poco a poco extraviándose y descendiendo en un mundo de feroces convenciones secretamente regido por la manipulación, el engaño y el chantaje.
Análisis de la novela y opinión personal: Lily Bart tiene diecinueve años cuando se queda huérfana. Primero murió su padre y luego su madre, de esta última aprendió la importancia del dinero y que una mujer no es nada sin un matrimonio solvente que la respalde. Con solo una pequeña renta que no le permite ser independiente, es acogida por su tía, la señora Penniston, una dama muy bien considerada en la sociedad neoyorquina pero que lleva una vida retirada un poco escandalizada por la deriva de la clase a la que pertenece.
Dotada de belleza e inteligencia, Lily brilla con luz propia en fiestas, saraos y reuniones, pero pasan los años y sigue soltera, aunque ha dejado escapar muy buenas oportunidades, y es que en el fondo, si bien desea dinero y una buena posición, también es cierto que quiere casarse por amor. Será entonces cuando en su camino se cruce Lawrence Selden, abogado, un hombre acomodado que no rico y que se mueve en el mismo ambiente que ella aunque sin formar totalmente parte de él. Lily necesita de la sociedad, Selden no ( salvo en lo que se refiere a su trabajo) y esta necesidad los separa pese a la atracción que los acerca; además Lily tiene un montón de deudas que no consigue pagar y las decisiones que toma para solventarlas ( casi todas equivocadas), amenazan con hundir su reputación y es que el mundo no perdona a quien no juega siguiendo las reglas establecidas y menos aún si se trata de mujeres. ¿Habrá esperanza para Lily?.
Dividida en dos partes y 29 Capítulos y narrada en tercera persona por un narrador omnisciente, La casa de la alegría nos ofrece una crítica feroz de la sociedad neoyorquina de principios del siglo XX que la autora tan bien conocía. Una sociedad en la que se asiste a la decadencia de las clases privilegiadas y al ascenso de la burguesía que va escalando posiciones gracias a su riqueza, y en la que la hipocresía, la deshonestidad, la manipulación y el intercambio de favores ricen sin concesiones la vida de los que que tienen la desgracia de pertenecer a ella.
Con una prosa precisa, elegante e irónica, Wharton refleja con maestría la situación de la mujer en la época en la que se desarrolla la novela: un bello adorno sin derechos, sin más deseos que encontrar un marido rico y con una frágil reputación.
La ambientación es magnifica y nos lleva de Nueva York a la Costa Azul para pasearnos por salones, jardines y mansiones tanto en el campo como en la ciudad. A destacar la importancia de las sucesivas casas en las que se va alojando Lily y que van a ilustrar su particular descenso a los infiernos.
Los personajes son muchos y algunos están mejor perfilados que otros, entre ellos cabe destacar: Lily Bart, la protagonista, una mujer hermosa e inteligente y amante de la belleza que ha sido educada para ansiar el dinero por encima de todo; con un buen fondo y un personal código de conducta, siente repugnancia ante un matrimonio sin amor pero necesita casarse para afianzar su posición económica por lo que se debate entre sentimientos contrapuestos lo que le influye a la hora de tomar sus decisiones porque no es lo suficientemente hábil para moverse en un mundo que ya no la quiere ni la necesita y que además no perdona.
Lawrence Selden, abogado, culto, refinado e irónico, su voluntario aislamiento social lo hace crecer en la estima de sus congéneres que lo interpretan como un signo de distinción.
Simon Rosendale, judío y nuevo rico, anhela entrar en la buena sociedad a cualquier precio; rudo y sin modales, también es capaz de destellos de bondad que lo hacen olvidar en ocasiones de sus aspiraciones materialistas.
Gertrude ( Gertie) Farish mujer en peor situación económica que Lily porque además es fea pero lo compensa con su mirada fresca y directa y su sonrisa franca, pese a su pobreza se dedica a la filantropía y es capaz de encontrar belleza en las cosas más pequeña.Prima de Selden, se convierte en una buena amiga de Lily.
Carry Fisher, divorciada y frívola, se mantiene y también a sus hijos trabajando para los nuevos ricos que quieren acceder a la sociedad privilegiada. A pesar de su carácter ligero, tiene un buen corazón y ayuda a Lily en lo que puede.
Junto a ellos, Gus Trenor y George Dorset, dos hombres casados con los que Lily mantiene confusas relaciones y la hipócrita esposa de George, Bertha.
La novela ha sido adaptada en dos ocasiones: en 1981 dirigida por Adrian Hall y protagonizada por Geraldine Chaplin y William Atherton entre otros. y en 2000, dirigida porTerence Davis con Gilliam Anderson, Dan Ackroyd y Anthony La Paglia. No he visto ninguna pero sería interesante hacerlo para comparar.
Me ha gustado muchísimo La casa de la alegría, una novela costumbrista que retrata de forma descarnada la sociedad neoyorquina de principios del siglo XX y la "condena" que les espera a las mujeres que no se ajusten a las reglas, para los hombres es otra cosa, tienen más libertad y sus actitudes no son juzgadas de forma tan despiadada. No deja de sorprenderme que son las mujeres, con unos comportamientos muy parecidos a los de Lily e incluso peores, las que más implacables se muestran en sus dictámenes.
En cuanto a Lily, la protagonista, es un caso aparte, a veces inteligente, a veces necia, no es capaz de decidirse y cuando lo hace se equivoca con nefastas consecuencias, lo que despierta en el lector ( al menos en mi caso), emociones contrapuestas de empatía y exasperación.
Respecto al final, aunque hubiera preferido uno totalmente distinto me parece apropiado y coherente con la trama.
Para terminar: El titulo de la novela os diré que hace referencia a una cita del Eclesiastés, 7.4 " El corazón de los sabios habita la casa del duelo pero el de los locos habita la casa de la alegría".
Participa




Parece un libro interesante. Te mando un beso.
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