Tras la máscara de Louisa May Alcott.

Como muchas de mi generación y de las anteriores y posteriores conocí a Louisa May Alcott como la autora de Mujercitas, primero con la edición censurada que circulaba en mi juventud, y muchos años más tarde en la edición integra publicada por Lumen, Así que Tras la máscara fue un autentico descubrimiento. La novela me tocó en un sorteo organizado por el blog Un lector Indiscreto y la tenía aguardando turno en mis estanterías,  ya que por un motivo o por otro nunca podía hacerle un hueco, hasta que las Inquilinas de Netherfield convocaron el reto Todos los clásicos grandes y pequeños. Entonces tuve claro que ya tenía novela para el apartado Clásico de 200 páginas o menos.

Y con esta reseña completo el Nivel 1.

            Editorial: dÉpoca. Fecha de publicación: 1866 /2018, 187 pág.

La autora: Louisa May Alcott (Germantown, Pensilvania 1832, Boston 1888) era hija del reformista y pedagogo Amos Bronson Alcott de quien recibió una esmerada educación . Su infancia y adolescencia transcurrió en los círculos trascendentalistas de Boston y Concord ( Massachusetts), siendo alumna de Emerson y Thoreau, cuyas enseñanzas humanistas ejercieron una gran influencia rn su pensamiento y su obra literaria. Tras el fracaso de su padre en la fundación de una comunidad utópica en Harvard, Louisa se vio obligada a impartir clases y trabajar de costurera y asistenta.

Partidaria de lla abolición de la esclavitud, en La Guerra Civil estadounidense trabajó como enfermera, experiencia en la que se basan las cartas que escribió a su familia y que se editaron con el titulo Apuntes del hospital ( 1863). En esa época contrajo fiebre tifoidea, que afectaría a su salud por el resto de su vida. Su primera novela Estado de Ánimo apareció en 1864. En 1865 viajó a Europa. Dos años después dirigió la revista para niños Merry´s Musseum.

El enorme éxito de Mujercitas ( 1868), una novela autobiográfica de su infancia en la que se narran las vicisitudes de una familia afincada en Nueva Inglaterra que, afectada por la ausencia del padre, combatiente en la guerra, atraviesa dificultades económicas, le permitió saldar sus deudas y devolver la tranquilidad económica a la familia.

Posteriormente publicó dos novelas que pueden considerarse secuelas de Mujercitas, Hombrecitos (1871), donde recreó el ambiente de la escuela innovadora creada por su padre, y Los muchachos de Jo ( 1886).

En 1877 publicó bajo seudónimo la novela gótica Un Moderno Mefistofeles, la historia de un poeta que firma un pacto faústico. Además escribió con el seudónimo de A,M,Barnard cuentos y novelas apasionadas, en una linea muy distinta de Mujercitas, como Tras la máscara. También publicó historias morales para niños.

Murió en Boston donde pasó los últimos años de su vida escribiendo. Su obra literaria abarca más de trescientos títulos.

Argumento: Inglaterra, 1866. La joven y recatada Jean Muir llega a la aristocrática mansión de los Coventry para trabajar como institutriz. Gracias a su astucia y sus múltiples habilidades, tras solo una jornada de trabajo consigue ganarse el afecto de la señora Coventry, su hija Bella, el hijo menor, Edward y sir John, el anciano y acaudalado tío. No ocurre lo mismo con Gerard, el hermano mayor, y Lucia, su prima, quienes desconfían de la institutriz y comienzan a espiar sus pasos. Pero Jean es una superviviente, su objetivo es asegurarse un esposo con riqueza y posición y no dudará en utilizar todas las armas femeninas a su alcance como máscaras tras las que ocultarse para alcanzar sus objetivos.

Análisis de la novela y opinión personal:  1866, A la mansión campestre de los Coventry, una acaudalada familia inglesa, llega la joven Jean Muir para trabajar como institutriz de Bella, la hija menor, que a sus dieciseis años ha sido lamentablemente descuidada.

Vestida de negro, con aspecto dócil y tímido y expresión cansada, la Señorita Muir suscita primero la compasión ( es huérfana y ha estado enferma) y luego la admiración ( tiene buenos modales, una hermosa voz y un modo hechicero de tocar y arreglar flores) de casi todos los Coventry y digo "casi" porque, aunque la Sra Coventry, Edward y Bella, enseguida se rinden a sus encantos, Gerarld, el hijo mayor y su prima Lucia Beauford, no son tan fáciles de conquistar. A Gerald, porque su carácter cínico e indolente le llevan a sospechar de todos y a Lucía, que está enamorada de su primo mayor desde hace tiempo, todos los dedos se le hacen huéspedes, y la institutriz se le atraganta desde el primer momento y está decidida a averiguar que pretende, porque en ella todo le parece poco claro.

Dividida en nueve capítulos y narrada en tercera persona por un narrador omnisciente. Tras la máscara es un " domestic noir", una historia que transcurre en el ámbito de una casa, la mansión de los Coventry y sus jardines, y en la que hay un misterio por descubrir, quién es y que pretende la institutriz. Pero también una historia de " sangre y truenos", más oscura, con un punto gótico y psicológico y no tan " moral" como Mujercitas, su novela más famosa.

En Tras la máscara, la autora aborda a través de la protagonista, muchos de los temas que le interesan: Las diferencias sociales, entre la Sra Muir, de una clase social diferente de la aristocrática familia Coventry.

El feminismo, Jean rompe con el estereotipo de la mujer de la época, que no sabían/podían hacer nada por si mismas, ella es una mujer capaz, que hace lo necesario para salir adelante, y sin la ayuda de ningún hombre.
Y el gusto por el teatro, lo que se manifiesta no solo en ue la obra se desarrolla a través de escenas teatrales, sino que en uno de sus capítulos, el quinto, la institutriz representa una función teatral para entretener a sus patrones.
Y es que en tras la máscara, como si de una obra teatral se tratara, muchos de los personajes, no sólo la institutriz, llevan una máscara, como también la autora, que tuvo que escribir bajo seudónimo varias de sus novelas, por chocar con la moral imperante.
En cuanto a los personajes, son muy pocos dada la brevedad de la obra, tenemos a la protagonista, Jean Muir, la joven institutriz, que llega a la mansión con el objetivo muy claro, y que posee las armas necesarias, inteligencia y determinación para lograrlo.
La Señora Coventry, " una pobre invalida"· según sus propias palabras, que deja  la supervisión de la casa en manos de su sobrina, Lucia.
Gerald, el hijo mayor y heredero, indolente y cínico, pero tan honorable como orgulloso, romántico bajo su fría apariencia.
Edward, el hijo más pequeño, joven, enérgico y afectuoso.
Bella, la benjamina, dulce, tierna y afectuosa, solo tiene dieciséis años, en el invierno será presentada en sociedad y debe prepararse para ello.
Lucia Beauford, dotada de orgullo y generosidad y enamorda desde hace tiempo de su primo Gerald, todos los miembros de la familia, que le tienen mucho cariño dan por supuesto que se carsará con él y Gerald es demasiado perezoso para elelgir por si mismo.
Sir John, un hombre saludable, apuesto y solitario, de entre 50 y 60 años, propietario de Hall, mansión cercana a la de los Coventry, y tío de los muchachos.
Con una cuidada ambientación y unos diálogos muy ingeniosos (especialmente los que se desarrollan entre la Srta Muir y Gerald Coventry),  un humor sarcástico e irónico, y una narración en que la tensión va aumentando paulatinamente sobretodo en el capitulo final, Tras la máscara es una historia deliciosa que se lee en un suspiro.
Me he divertido un montón leyendo Tras la máscara, aunque por mucho que lo he intentado no he conseguido empatizar con la protagonista, puedo entender sus motivos, pero no los métodos que utilizó.Eso si, la novela me ha parecido muy buena, prueba de ello es lo mucho que la he disfrutado sin necesidad de que su protagonista me cayera bien, cosa que en otras historias me ha resultado imprescindible.
Para terminar: ¡No fracasaré de nuevo si cuento con el poder del ingenio y la voluntad de una mujer!.

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